No recuerdo si en algún momento de mi tiempo laboral he pillado vacaciones en octubre, pero este año mi segunda quincena la estoy disfrutando a día de hoy tras haberlas suspendido en agosto cuando todos los planes se vinieron abajo.
Soy una persona enamorada de la playa...el sol...el mar y el periodo estival aunque todo el mundo habla que es una locura la verdad es que a mi me encanta. Tumbarme bajo el sol y disfrutar de sus caricias es un placer para mi, una recarga de energía natural y maravillosa.
Pero estamos en el mes diez del año, poco sol y desde hace unos días parece que ha llegado el frío y la lluvia, cosa que muchas personas agradecen pero que a mi no me termina de gustar ni convencer. Lo llevo bien vamos, pero no es lo mío.
Con la llegada del frío y el tiempo desapacible nos damos cuenta de que la navidad ya casi esta aquí, y eso me hace darme cuenta que ya hace seis meses .
La navidad precisamente no es mi época favorita del año, digamos que la paso con más pena que gloria y que las celebraciones y demás actos navideños los vivo más por los otros que por mi. Y este año no va a ser diferente pero si será mucho mas duro y difícil de llevar. No hay nada seguro aun, pero muy probablemente tendrá su ausencia y eso es algo con lo que tendré que lidiar e intentar manejar lo mejor que sepa o pueda. Se que tendré apoyos y motivaciones para que el vacío sea lo menor posible, pero la sensación...el sentimiento...los días sin...el buscarla en todo momento solo lo viviré yo y será a mi al que le deje esa marca que durara para siempre.
