primer intento de llegar al roque nublo y disfrutar de un tipico bocadillo de chorizo de teror y queso semi duro a la sombra de la gran roca y con los pies colgando sobre el precipicio. por el camino te puedes cruzar con todo tipo de personas, desde guirys despistados con sus bermudas y camisillas abrigandose con la toalla, hasta peninsulares descubriendo nuestras montañas y por supuesto, gente de aqui, de nuestra tierra, autenticos canariones.
pero no resulto, la niebla impidio que la aventura se culminara con exito, aunque el bocadillo lo comi con el mismo entusiamo que si lo hubiese conseguido.
no obstante, goce del paseo, me sirvio mucho el aire limpio, puro y fresco de la cumbre, caminar entre los pinos, escuchar el sonido del viento entre ellos, para llegar hasta la roca y poner la mano sobre el monumento en piedra y sentir como su energia me recagaba y me dejaba muy buenas sensaciones.
habran mas intentos, esperando que el tiempo acompañe y se pueda culminar con exito dicha aventura.
quien te tiene que acompañar es el sol... y no hablo del que está en el cielo ;-)))
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